El mundo cae, colisiona frente al espejo. Las personas viven desesperadas, con miedo a todo lo que se pueden imaginar. Algunos lloran mientras otros añoran sin parar, algunos aún siguen atrapados en el “hubiera”.
Mientras las dos aves en lo alto pelean a muerte la sangre se derrama en el lienzo eterno de la vida.
¿Qué nos queda hacer?
No lo sé, en realidad, nadie lo sabe.
Nos toca ser sabios, aprender a dar bien los pasos, a no ser muy confiados pero tampoco demasiado arrogantes. Tenemos que mostrar lo mejor, lo ideal.
Fotografía hecha por @dashahorita